martes, 17 de julio de 2012

Crónica de un viaje al Nororiente Peruano


Por: Evaristo Chunga Zapata


En Pedro Ruíz Gallo










































A continuación les presentamos algunos detalles del viaje realizado del 18 al 21 de abril del 2011, al Nororiente Peruano, por un grupo de 34 personas que trabajamos en la Asociación Chira – Centro de Formación Profesional Binacional, habiendo conocido la Fortaleza de Kuélap, Laguna de Pomacochas, Catarata de Gocta (La tercera más alta del mundo), Chachapoyas en la Región Amazonas y Jaén en La Región Cajamarca. Siempre con las orientaciones y enseñanzas del Ingeniero Agrónomo, Baudilio Valladolid Catpo, natural de la zona. Aprendimos a convivir con la exuberante naturaleza, el sofocante calor en horas de la mañana hasta el atardecer y ligero frío en horas de la madrugada, ríos caudalosos, lluvia, frutales, bebidas exóticas, plantas medicinales, trucha frita, olor a plantas y animales salvajes.

Lunes 18 de abril

Ya estamos a punto de iniciar el viaje hasta la región amazonas. Son la una de la tarde del día lunes 18 de abril, luego de almorzar fugazmente recibimos las instrucciones de Joel Troncos, Director Ejecutivo de La Asociación Chira, sobre el viaje que por 4 días haríamos a una de las regiones más hermosas y enigmáticas del Perú: La Selva. Rostros sonrientes y alegres por conocer lugares nuevos, pero al mismo tiempo con nostalgia por la separación temporal de nuestros familiares.

El bus de la empresa de Transportes Sol del Perú, inició el viaje rumbo a uno de las regiones más hermosas del País: La Selva. En treinta minutos ya estábamos en El Cincuenta, una de los lugares muy populares de la antigua panamericana. Lugar obligado de los viajeros, porque en este lugar se puede saborear, cebiche, carne aliñada, seco de cabrito, cachemas encebolladas, chifles, entre otros platos típicos, especialmente de Chulucanas, y por supuesto chicha de jora y clarito helado. Chulucanas es la capital de la provincia de Morropón ubicada a 10 minutos del populoso caserío, El Cincuenta.

Han transcurrido 15 minutos de haber partido de El Cincuenta, y ya estamos en El sesentaicinco, otro de los lugares donde los vehículos obligadamente se detienen, para que los pasajeros adquieran entre otras cosas, frutas o alimentos ligeros para el viaje y además porque hay un puesto de control policial. A partir de estos momentos ingresamos a la Región Lambayeque siempre en la ruta de la carretera, antigua panamericana.


Ya estamos en la Región Lambayeque. El bus recorre la carretera que se encuentra en excelentes condiciones y que nace desde la inmensidad del Océano Pacífico (Paita), hasta el corazón de la Amazonía constituyendo una vía segura al desarrollo para el Norte y Nororiente Peruano. Y hemos llegado al peaje Olmos, donde se aprecia la palabra IIRSA la peligrosa “cuesta de Naupe”. Todos se preguntan por el significado de las siglas IIRSA. Hemos observado la cuesta de Olmos, un lugar donde el vehículo tiene que recorrer pendientes, pasar por curvas bastante cerradas, bordear los cerros hasta llegar a la parte más alta.

Algunos datos. IIRSA significa Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana y es un foro de diálogo entre autoridades responsables de la infraestructura de transporte, energía y comunicaciones en los doce países suramericanos, entre los que se encuentra el Perú.

Esta iniciativa surge de la Cumbre de Presidentes de América del Sur realizada entre los días 30 de agosto y 01 de septiembre del año 2000 en la ciudad de Brasilia, Brasil. En esta reunión los mandatarios de la región acordaron realizar acciones conjuntas para impulsar el proceso de integración política, social y económica suramericana, incluyendo la modernización de la infraestructura regional y acciones específicas para estimular la integración y desarrollo de subregiones aisladas.

Concesionaria IIRSA Norte es la empresa (Conformada por Odebrecht y Graña y Montero) que construye, rehabilita, mejora, mantiene y opera por concesión los 955 km de carretera que une el puerto marítimo de Paita con la ciudad de Yurimaguas, atravesando las regiones de Piura, Lambayeque, Cajamarca, Amazonas, San Martín y Loreto; posibilitando así la interconexión fluvial del Norte Peruano con el Brasil

Ya estamos ingresando nuevamente a la Región Piura, apreciando poblados pertenecientes al distrito de Huarmaca, provincia de Huancabamba, tales como Pasallapampa, El abra de Porcuya, El Tambo (el río se encuentra sin agua), Puente Huancabamba, Puente San Felipe, entre otros pueblos.

El Abra de Porcuya: es el paso más bajo de la Cordillera de los Andes a 2100 m.s.n.m., considerada la depresión más importante de la Cordillera de Los Andes, se encuentra en el Distrito de Huarmaca, en la Vía Olmos - Porcuya - Hualapampa - Huarmaca. Es por este lugar por donde hace su paso el Oleoducto Nor-Peruano, luego de recorrer enormes distancias desde Trompeteros, hasta Bayóvar, Sechura transportando el Oro Negro.

El Abra de Porcuya ha sido zona de estudio por diferentes disciplinas de la biología, cuyos estudiosos consideran que por sus características muy especiales ha dado origen a especímenes que son relictos de esta zona. Así mismo la zona contigua al Abra de Porcuya es riquísima en accidentes geográficos que pueden causar asombro y aún miedo entre los visitantes

Ya son las 6.00 de la tarde y viajar por esta carretera, nos permite conocer parte de la Región Cajamarca, pues ya estamos en el Peaje Pomahuaca, en el distrito Dos Juntas, donde se aprecian grandes extensiones de cultivo de arroz. Luego apreciamos Pucará. La noche cubre con su manto negro toda la zona, hasta el momento todo ha transcurrido entre bromas, chistes, conversación amena, risas en coro. Cuando había señal en los celulares, muchos aprovechaban para comunicarse con sus familiares. Ahora ya estamos en el Peaje de Utcubamba, en la Región Amazonas. Han transcurrido ocho horas de viaje y la mayoría de los pasajeros duermen.

Son las diez de la noche y por fin llegamos a Pedro Ruíz, en Región Amazonas, lugar desde donde nos trasladaríamos a la Fortaleza de Kuélap, Laguna de Pomacochas, Catarata de Gocta, y Chachapoyas. Pedro Ruíz, es el lugar que nos cobijará durante cuatros días, lugar donde llegan todos los que viajan a diferentes lugares de la zona, nos dice la señora que nos atiende con la cena (una sopa de gallina). Basta con observar varias agencias de empresas de transportes atiborradas de pasajeros, entidades bancarias, mototaxis en cantidad, paraderos de autos, hospedajes, hoteles, comerciantes y el desorden, característica de aquellos lugares en crecimiento económico. Es hora de ir a descansar, porque mañana martes 19 de abril conoceremos la Fortaleza de Kuélap y La Ciudad de Chachapoyas.

Palabras muy urgentes


Por: Evaristo Augusto Chunga Zapata (*)

Hemos nacido en el Perú, país latinoamericano, subdesarrollado (para los “líderes políticos” en vías de desarrollo, o países emergentes), con gobernantes enclenques y mediocres, con una  clase política en ruina mental, una incertidumbre fabulosa y la mierda extendiéndose vertiginosamente a lo largo y ancho del país, pues por donde pongamos el dedo, brotará el pus.

He vivido décadas y todo este tiempo siempre el pueblo peruano exigió acabar con la corrupción, con la injusticia, el abuso, la impunidad, pero la situación es peor, los males del país se han ampliado, son más profundas originando indignación y por supuesto desconfianza y desesperanza.

Por un lado tenemos los jaleos políticos, domésticos con sus líderes torpes e ignorantes pretendiendo desestabilizar la democracia del cual ellos participan y defienden y de otro lado la mano sucia de los grupos de poder económico, manejando a su antojo al pueblo peruano.

Los partidos tradicionales, y los “nuevos” partidos cuyos miembros son los mismos que militaron en otros partidos de izquierda tradicionales, a los que se suman, los partidos políticos que pretenden constituir aquellos que acabaron con la vida de centenares de miles de peruanos y peruanas en nombre de la “guerra popular” pero al igual que los reptiles han  “mudado” de piel y se ponen de acuerdo a escondidas en contubernio, con algunos miembros del Ministerio Público, Poder Judicial, Tribunal Constitucional, Fuerzas Armadas y Policiales, Iglesia Católica, Partidos Políticos, para que defiendan sus intereses mezquinos. Por supuesto que todo aquello hace la hora irrespirable, ha sofocado a muchos peruanos y peruanas.

En esta época caótica llena de desfallecimientos y omisiones la toma de situación y conciencia es ineludible. Es necesario manifestarnos como personas libres, con una nueva responsabilidad, con una nueva actitud ante el acto creador, ante los hechos derivados de una realidad con la que no estamos de acuerdo.

Estamos atentos a lo que se está haciendo en nuestro país. Queremos cambios profundos, conscientes de que todo lo que viene es irreversible porque el curso de la historia es incontenible y en América Latina y en los países “emergentes” (antes se les denominaba del tercer mundo) se encaminan a lograr equidad, igualdad en sus pobladores. Entonces, cojamos todos y todas las segadoras y limpiemos los escombros, pues se nos ha entregado la misión de construir una nueva sociedad.

Creemos el deber de expresar las circunstancias presentes sin contemplaciones, porque es hermosa y ardua la tarea que abarca ser sincero con uno mismo. Siempre ha sido fácil establecerse en lo que ya está hecho en plan de observador indiferente que se omite. Pero ahora es preciso propiciar los hechos participando en su realización.

En este nuestro país, siempre han existido los fracasados, los que muestran una ignorancia descomunal, con resultados espantosos y que sostienen este sistema injusto que se cae a pedazos.  Se ejercita el silenciamiento, la confusión, la venganza política y la degradación perversa.

Todas aquellas generaciones bastardas han encontrado este panorama que hoy observamos y con su silencio, su cobardía y su reverenda flojera para la investigación o el estudio se ayudó para que nada cambiara. Solamente se hizo el intento de querer cambiar el sistema a consecuencia de masturbaciones mentales, de lucubraciones, de gritos histéricos o cosquillas para contentar a los gobernantes.

Frente a esta situación proponemos un cambio de mentalidad en los peruanos y peruanas y esto pasa por priorizar la educación, una educación para la vida, para la familia, para el trabajo, para el servicio a todos y todas sin distinción de nada.

Que la educación  constituya una lucha viviente, que no escape nada en nuestro trayecto de hombres momentáneos en la tierra. Creemos que el acto creador exige una inmolación de todos los días. Definitivamente deben terminar los líderes místicos, bohemios, inocentones, engreídos, locos o cojudos.

Necesario es pues dejar las nubes en su sitio. Si somos iracundos es porque esto tiene dimensión de tragedia.  A nosotros se nos ha entregado una catástrofe para poetizarla, para transformarla. Se nos ha dado esta coyuntura histórica para culminar una etapa lamentable y para inaugurar otra más justa.

Somos peruanos, con los testículos y la lucidez que no tuvieron muchos que nos antecedieron. Tenemos también un poderoso deseo de permanecer libres, con una libertad sin alternativas, que no vacile en ir más allá, para que esto siga siendo lo que es: un solitario y franco proceso de ruptura.

(*) Licenciado en Periodismo
      Ing. Agrónomo